El jefe de seguridad de la empresa BlackBerry, David
Kleidermacher, y el encargado de seguridad de la compañía, Graham
Murphy, demostraron que las bombas de infusión de medicinas, de las
cuales depende la vida de muchos pacientes, pueden ser 'hackeadas'.
Esto se llevó a cabo en el marco del BlackBerry Security Summit, que
tuvo lugar el mes pasado.
Según una publicación del portal Wired, 'hackers' lograron tomar control de una bomba de infusión de medicina fabricada por la empresa estadounidense Hospira, que cuenta con más de 400.000 bombas de infusión instaladas en hospitales de EE.UU.
El dispositivo de la marca Hospira está conectado a una red Wi-Fi, lo que permite a los especialistas en informática establecer el control de sus funciones, pero también abre la posibilidad de que los 'hackers' puedan manipularlas.
En ese sentido, profesionales de BlackBerry demostraron que los 'hackers' podrían detener la infusión de medicinas que son vitales para los pacientes o dar una dosis de medicamento letal, hecho que hace necesaria la alteración de este tipo de tecnologías utilizadas actualmente en los hospitales.