Stalker es un incómodo término que describe
en inglés a quien cotillea el muro o las fotos de otra persona en
internet y las redes sociales, por descontado, sin su conocimiento. Pero
una cosa es cotillear sin más ambición que pasar el rato y otra bien
distinta es hacer una captura de pantalla de la foto para guardársela.
Un hábito que preocupa a algunos usuarios y que ciertas redes sociales
se han dispuesto a atajar.
En este sentido, Snapchat fue una de las primeras de
las primeras aplicaciones sociales que incorporó una función que
alertaba al usuario de que otro había hecho una captura de pantalla. Es
cierto que no evitaba la captura, pero el rubor de saber que le habían
pillado a uno inmortalizando una foto efímera era todavía peor.
Snapchat fue una de las primeras de las primeras
que incorporó una función que alertaba al usuario de que otro había
hecho una captura de pantalla
Hecha la ley, hecha la trampa. Circula ya por internet
una guía mediante la cual se puede burlar esta alerta de Snapchat y de
una manera relativamente sencilla, además. Para ello, hay que seguir los
siguientes pasos:
- Abrir Snapchat y descargar las fotos sin llegar a
abrirlas (basta con pulsar sobre el icono de la foto, pero no sobre el
nombre).
- Poner el móvil en “modo avión” momentáneamente.
- Abrir el Snap descargado (aparecerá la fotografía en cuestión).
- Hacer la captura.
- Cerrar la aplicación (asegurarse de que se cierra por completo y no se está ejecutando en segundo plano).
- Desactivar el “modo avión”.
No, Instagram no avisa de las capturas
Básicamente lo que se hace es efectuar la captura con
el móvil sin acceso a internet de forma que no pueda enviarse la
notificación, y luego cerrar la aplicación para que esta notificación
sea borrada. Otra red social que se le ha atribuido la notificación de
las capturas de pantalla ha sido Instagram, pero en realidad ha habido una gran desinformación
en este asunto. Instagram no avisará de las capturas de pantalla en
general que se hagan dentro de la aplicación, como se había asumido
inicialmente, salvo en un sólo supuesto: cuando se haga una captura de
una imagen que se haya enviado a un usuario mediante Stories, es decir, a
través del canal de esta red cuyo contenido desaparece. Esta medida no
es tan drástica como la adoptada por Snapchat, que alerta de cualquier
captura que se haga, sino que se pretende evitar esta práctica en los
mensajes privados, más susceptibles de contar con un contenido más
delicado.