Según reportes, el gigante estadounidense podría hacer un nuevo pedido a su rival surcoreano evaluado en más de 4.300 millones de dólares.
La compañía Samsung Display ha recibido de Apple un pedido adicional
de pantallas OLED (con diodos orgánicos de emisión de luz) estimado de
cinco billones de wones surcoreanos (4.350 millones de dólares), informa
el diario 'Korea Herald'.
Según
fuentes citadas por el periódico, la orden asciende a 60 millones de
pantallas OLED, las que se sumarían a las otras 100 millones que habrían
sido vendidas a Apple el pasado mes de abril. De esta manera, el
reciente encargo convierte a Samsung en el mayor proveedor del nuevo
'smartphone' de su rival, el iPhone 8, cuya salida al mercado se espera para otoño.
Analistas estiman que Samsung va a suministrar cerca del 80% de la demanda total de las pantallas, dado que cada modelo de iPhone ha vendido más de 200 millones de unidades.
Según explica el portal CNET,
el volumen de las dos supuestas transacciones sugiere que cada pantalla
OLED podría costarle a Apple más de 70 dólares. Las empresas no han
conformado el hecho, pero ello coincide con otros reportes de que el
iPhone 8 podría costar más de 1.000 dólares.
Los 'smartphones' de
Samsung de alta gama son conocidos por lucir pantallas con forma curva,
una característica que ha asegurado un punto de diferencia para los
productos surcoreanos. Si la información de que Apple ha comprado esa
cantidad de pantallas curvas se confirma, los móviles de Samsung ya no contarán con esta característica que los hace únicos.