Microsoft ya ha sido alertado de la amenaza, pero aún no ha informado de un parche de seguridad.
Expertos en seguridad informática han detectado una nueva amenaza
basada en un 'bug' muy conocido de la década de 1990 que afectaba a
Windows 95 Y 98, que podría provocar errores en versiones más recientes.
De acuerdo con el portal tecnológico Ars Technica,
los delincuentes cibernéticos diseñan archivos similares a los que usa
Windows para controlar los dispositivos de 'hardware', que bloquean el
sistema y pueden provocar la aparición de la famosa 'pantalla azul de la muerte' (BSOD, por sus siglas en inglés), que obliga al usuario a reiniciar el equipo.
BSOD
aparece cuando el sistema detecta un fallo grave y no puede arrancar
correctamente debido a una serie de errores, como un daño en la memoria
RAM, un virus o una incompatibilidad de controladores.
Este nuevo fallo es propagado en Internet a través del correo electrónico o de sitios web
en forma de archivos de imágenes, que al ser abiertos por la víctima,
provocan la "caída" de Windows. El error se aloja en el directorio raíz
del sistema de archivos NTFS, pero estos están ocultos a la vista y son
inaccesibles para la mayoría del 'software'.
El nuevo 'bug', que parece no afectar a Windows 10 -ya que utiliza otro tipo de archivos de sistema-, puede provocar problemas principalmente a Windows 7, 8 y Vista.
Según se explica, algunos navegadores pueden bloquear el intento de los
atacantes de acceder a los recursos locales del equipo, pero otros como
Internet Explorer podrían no hacerlo.
Microsoft ya ha sido alertado de la amenaza, pero aún no ha informado de un parche de seguridad.
Por el momento se recomienda evitar ingresar o abrir archivos de
páginas sospechosas o enlaces recibidos a través del correo electrónico.
En otro caso, la actualización del sistema a Windows 10 también
neutralizaría el riesgo.