El gran problema de aquello que está oculto, es que también oculta la verdad. Sabemos que la Dark Web existe pero, ¿cuánto hay de verdad o de mentira sobre ella?
¿Es la Dark Web un mito inventado por los periodistas y por aquellos que quieren regular Internet?
La
realidad es que los principales buscadores apenas indexan el 10% de
todo el contenido de Internet. El 90% restante permanece oculto o, más
claramente, no está en la lista de resultados de los buscadores. Es lo
que se conoce con el nombre de Deep Web. Que esté
oculto no significa que sea ilegal. La aburrida verdad es que la mayoría
de este contenido no aparece en los buscadores porque no tiene
utilidad. Bases de datos anticuadas, operaciones bancarias temporales,
páginas webs protegidas por contraseña... Pero la Deep Web tiene un lado oscuro: la Dark Web.
La Dark Web es una porción de la Deep Web que está encriptada y protegida,
y no se puede entrar por los medios tradicionales (navegador, FTP,
etc.). Se accede mediante anvegadores y aplicaciones especiales, y solo
puedes entrar si sabes exactamente donde tienes que ir, o si conoces
ciertas claves y privilegios.
Debido a su caracter oculto, nadie sabe exactamente lo que hay o lo grande que es la Dark Web.
Mucho de ese contenido es ilegal: aquí es donde comparten conocimientos
y herramientas los ciberdelincuentes, se trafica con armas, dinero
negro, droga, y se llevan a cabo todo tipo de actividades ilegales,
desde intercambiar material pedófilo a contratar a un asesino a sueldo. Hay muchos estudios y muchos análisis de la Dark Web, y en la mayoría de los casos se concluye que existen millones de páginas webs desconocidas.
El contenido de la Dark Web se almacena en la Darknet, la red de servidores encriptados que garantiza el anonimato de los usuarios. La red más famosa es TOR. Es importante tener claro que TOR no es una red ilegal ni fomenta la ilegalidad. Su única función es encriptar contenido y borrar el rastro de sus usuarios. Es una red de anonimización
y aunque es cierto que la usan ciberdelincuentes, también es una
herramienta vital para perseguidos políticos, periodistas, y ciudadanos
que viven en países sin libertad de expresión.
Este fin de semana se ha celebrado la DEF CON, una de las convenciones de hackers más importantes. En una de las conferencias ha participado Roger Dingledine, uno de los tres fundadores de TOR, que ha sorprendido a todos afirmando que la Dark Web es un mito: "Básicamente no existe la Dark Web. Son sólo unas pocas páginas web".
Dinfledine ha cargado contra los periodistas y difamadores que atacan a TOR acusándola de ser un nido de ciberdelincuentes y actividades ilegales.
"Solo el 3% de los usuarios de TOR se conectan a páginas web ocultas", afirma el cofundador de TOR. "La mayoría de los usuarios simplemente buscan evitar que los dueños de las webs que visitan los rastreen".
Asegura que Facebook es la web más visitada dentro de TOR, con más de un millón de usuarios.
Estas declaraciones de Roger Dingledine solo añaden confusión a un tema ya de por sí confuso. Es obvio que la Dark Web es real, como se ha demostrado en numerosos arrestos e investigaciones, incluyendo el famoso escándalo Silk Road. No sabemos lo grande que es, y quizá sea cierto que se ha exagerado mucho el tema. Pero afirmar que la Dark Web no existe, o que TOR se
usa principalmente para entrar en Facebook, tiene toda la pinta de ser
un (legítimo) intento de lavar la imagen de TOR, que por otro lado no
tiene culpa de nada, pues los culpables son los delincuentes y no las herramientas.