En el marco del experimento, más de 100 participantes tenían que enfocarse en un punto de fijación estable durante cinco minutos.
Un nuevo estudio del Instituto de Tecnología de Georgia (EE.UU.)
sugiere que altos niveles de habilidades intelectuales pueden ser
reflejados por una frecuente costumbre cotidiana, según informa el
portal Science Daily.
Se
trata del hábito de soñar despierto, algo que con frecuencia se asocia
con estar despistado o distraído, y se percibe con desaprobación. En el
marco del estudio los científicos estadounidenses estimaron los patrones cerebrales de más de 100 personas, quienes se encontraban dentro de máquinas de imagen por resonancia magnética (IRM).
Los
participantes tenían que enfocarse en un punto de fijación estable
durante cinco minutos. Los investigadores analizaron los datos obtenidos
para identificar qué partes del cerebro "funcionaron en conjunto
durante ese descanso".
La psicóloga Christine Godwin ha señalado
que el experimento mostró que los patrones cerebrales registrados en
estos estados "están relacionados con diferentes habilidades cognitivas".
El equipo comparó los datos sobre cómo actúa el cerebro durante un
descanso, con las pruebas en las que los participantes mostraron sus habilidades intelectuales y de creatividad. Además, se les pidió responder a preguntas sobre cuánto tiempo pasan soñando despiertos.
Aquellas personas que confesaron soñar despiertas con frecuencia mostraron mejores resultados, según dichas habilidades, y sus sistemas cerebrales se vieron más eficientes en las máquinas IRM.
"Las
personas tienden a tratar las divagaciones como si fuese algo malo", ha
señalado Eric Schumacher, profesor asociado de Psicología, destacando
que sus nuevos datos muestran que "no siempre es verdad". De hecho,
"personas con cerebros eficientes tendrían demasiada capacidad cerebral para poder evitar que sus pensamientos divaguen".