En los últimos meses, con el ‘boom’ de las criptomonedas, se ha puesto de moda una nueva forma de ataque a los usuarios de Internet, y de monetización por parte de algunos portales web. El minado de criptomonedas es cada vez más habitual, tanto de forma intencionada como por ‘hackeos’, y algunos usuarios no saben cómo protegerse de esta amenaza que, aunque no es dañina de forma directa, reduce el rendimiento de los ordenadores de forma drástica. Hay una forma de saber si nuestro navegador web nos protege.
Cryptojacking Test es una herramienta de Opera que podemos lanzar desde el propio navegador web y que en cuestión de segundos nos dice si estamos protegidos por el software que estamos utilizando, o si bien estamos quedando expuestos a un posible ataque de este tipo. En caso de respuesta negativa, sencillamente podríamos experimentar cómo al navegar por determinadas páginas web se ralentiza de forma perfectamente notable, y la ventilación alcanza su máxima potencia tratando de refrigerar los componentes de hardware. En caso afirmativo, tu ordenador está seguro.
¿Te protege tu navegador web de los ataques de minado de criptomoneda? Así lo puedes comprobar
En este caso, si el test te devuelve una respuesta negativa informándote de que no estás seguro, evidentemente la respuesta para el mismo es que descargues Opera. Aunque es un navegador web mucho menos popular que Firefox o Google Chrome, y así lo demuestra su cuota de mercado a nivel internacional, se han adelantado en lanzar la protección necesaria para evitar el código malicioso que se dedica a minar criptomoneda. Para el resto de navegadores web hay formas de proteger nuestro ordenador, pero Opera ofrece un ‘filtro’ integrado.
Descarguemos el navegador web Opera, o no, lo cierto es que es una herramienta tan sencilla como útil para conocer cuál es el estado de nuestro navegador web, y su seguridad, con respecto al ataque que más se ha puesto de moda en los últimos meses: el minado de criptomoneda. Porque, aunque las cryptos están pasando por un mal momento tras su enorme crecimiento a finales de 2017, estas amenazas de malware siguen creciendo de forma progresiva.