Conozca los 10 experimentos científicos que demuestran que su cerebro puede ser fácilmente controlado por factores externos sin su consentimiento.
Desde hace muchos años los científicos tratan de estudiar y
comprender el funcionamiento del cerebro humano, como así también las
maneras de manipularlo. Dichas investigaciones son capaces de ayudar en
la lucha contra varias enfermedades, pero por otro lado
provocan polémica, ya que sus resultados permitirían elaborar mecanismos para controlar el comportamiento de las personas. La revista
'Popular Mechanics' ha
destacado diez asombrosos experimentos que muestran que el cerebro
humano puede ser fácilmente manipulado por factores externos.
El descifrador del cerebro
Cuando leemos para nosotros, escuchamos la voz en nuestra cabeza. En
base a esto, científicos de la Universidad de California, EE.UU., tratan
de descifrar la actividad neuronal para
crear un implante que traduzca las señales cerebrales en habla a través de un sintetizador de voz. De este modo, será posible hacer 'hablar' a las personas con discapacidad y hasta a pacientes en coma.
La ilusión de la mano de mármol
Durante un experimento, los científicos pidieron a los voluntarios
poner sus manos sobre la mesa y golpearon suavemente sus manos derechas
con un pequeño martillo. Al mismo tiempo, los practicantes escuchaban el
sonido de un martillo contra un mármol. En unos minutos, empezaron a
sentir que su mano era cada vez más pesada y dura, como si fuera un
trozo de mármol. De ese modo,
el cerebro combina de manera
constante la información de diferentes sentidos, cambiando la percepción
del cuerpo aunque éste siga igual.
El efecto calor/frío
La temperatura puede influir en el nivel de confianza entre las personas. Durante
el famoso experimento 'El dilema del prisionero' a dos 'sospechosos
delincuentes' los separaron en diferentes celdas y les propusieron
testificar contra el otro a cambio de una sentencia más leve. Al mismo
tiempo, uno de ellos debía sujetar un objeto caliente mientras que el
otro debía mantener un trozo de hielo en su mano. Tras varios
experimentos con diferentes personas, resultó que los primeros
resultaron ser más decididos a confiar en su compañero y no calumniar
contra él.
Teletransportación
Investigadores del Instituto Karolinska, en Suecia, lograron imponer a
los voluntarios la ilusión de una experiencia extracorpórea. Los
participantes fueron colocados en un escáner cerebral capaz de crear
ilusiones y ficciones. En unos segundos,
la gente tuvo la sensación de estar en otro lugar, dentro de otro cuerpo.
El efecto McGurk
El experimento demuestra cómo lo que vemos influye en lo que escuchamos. De
este modo, si vemos en el video a una persona moviendo los labios como
si dijera "ga" pero en el audio escuchamos "ba", el cerebro lo convierte
en "da", probando de este modo que las cosas no siempre son lo que
parecen.
El grabador cerebral
Este dispositivo, que actualmente se está desarrollando, permitirá a
las personas que sufren parálisis expresar sus pensamientos. Un casco de
electrodos, tecnología de seguimiento del movimiento de los ojos y un
'software', permiten que
una persona paralítica retransmita sus palabras e ideas en la pantalla de la computadora al mover el '
mouse'
con la mirada.
Un aislamiento duradero
A la mayoría de la gente un aislamiento duradero le provoca graves
trastornos mentales: alucinaciones y una percepción alterada del tiempo,
entre otros. Se demostró que
durante un aislamiento duradero en la oscuridad, el ciclo diario puede aumentar hasta 48 horas: a 36 horas de actividad, les siguen 12 horas de sueño.
La ilusión del cuerpo invisible
Otro experimento del Instituto Karolinska
muestra cómo una persona puede pensar que vive en otro cuerpo.
Los voluntarios portaban gafas que proyectaban la imagen de un maniquí.
Los investigadores comenzaron entonces a tocar varias partes del cuerpo
de los practicantes y al mismo tiempo las del maniquí. De este modo,
los primeros sentían que ellos mismos eran estos maniquíes. Al hacer lo
mismo pero en el espacio vacío, los voluntarios sentían que su cuerpo
era invisible.
La estimulación eléctrica de la creatividad
Científicos de la Universidad de Carolina del Norte han demostrado
que la electricidad puede aumentar la creatividad humana. A los
voluntarios de entre 19 y 30 años
los sometieron a una
estimulación eléctrica para generar así las llamadas ondas cerebrales
alfa, que se relacionan con el pensamiento creativo. Resulta que su creatividad aumentó en promedio 7,4% tras el experimento.
La pastilla de la compasión
Investigadores de la Universidad de California, EE.UU., han descubierto que
pueden manipular el 'nivel' de compasión de las personas al cambiar la bioquímica de sus cerebros.
A un grupo de personas les entregaron pastillas placebo, mientras que a
otros, la medicina tolcapona, que acelera la acción de la dopamina, la
'hormona de la felicidad'. Al pedir a los voluntarios compartir su
dinero entre desconocidos, el segundo grupo resultó ser más generoso.