Después de cien años de estudios los científicos suizos finalmente han logrado revelar el misterio de los agujeros de su queso nacional.
Según informa el periódico 'The Telegraph',
los investigadores de Agroscope, el centro estatal para la
investigación agrícola en Suiza, han determinado que los agujeros
característicos que se encuentran en algunos tipos de queso
como el Emmental y el Appenzell son causados por pequeños trozos de heno
presentes en la leche utilizada para elaborarlos.
Durante una serie de experimentos, los investigadores añadieron diferentes cantidades de polvo de heno a la leche y descubrieron que esta actividad les permitía controlar el número de orificios presentes en el queso.
De acuerdo con los científicos, los resultados también explican por
qué los agujeros han ido disminuyendo en los últimos 15 años. El motivo
es que las técnicas modernas de ordeño con máquinas de sellado han
eliminado casi completamente la posibilidad de que partículas de heno
acaben en la leche.