Según publica «The Daily Telegraph», la filtración podría involucrar a algunas de las personas más ricas del mundo, que ya se han puesto en contacto con abogados y agencias de relaciones públicas en un intento de proteger su reputación.
La divulgación de la filtración también amenaza con poner en entredicho la supervisión gubernamental de varios territorios de ultramar que pueden ofrecer beneficios fiscales a los muy ricos, sobre todo si se ponen al descubierto actividades o conductas cuestionables. Este hackeo se produce después de que hace unos meses vieran la luz los «Papeles de Panamá», una filtración masiva que dejó al descubierto la riqueza oculta de algunas de las personas más poderosas del mundo.
Alrededor de 11 millones de archivos de la firma de abogados Mossack Fonseca fueron filtrados, con revelaciones que obligaron, por ejemplo, al primer ministro de Islandia a renunciar. Bermudas, que tiene uno de los ingresos más altos per cápita, se ha defendido previamente contra las acusaciones de que es un paraíso fiscal, afirmando que las autoridades están informadas de los beneficiarios de todas las compañías fiduciarias instaladas en sus costas.
