Cuando estás pensando en tus futuros clientes o lectores, son muchas las ideas que te vienen a la cabeza y es evidente que debes enfocar todo tu proyecto con esa actitud.
Desde: el contenido, el tipo de usuario que quieres atraer, el diseño o estilo, dónde vas a alojar tu web y el dominio que vas a utilizar.
No puedes solicitar un servicio de Hosting para una tienda online pensando que el pack más barato (que sirve para un blog personal), te va a funcionar de la misma manera.
Para poder hacer esto, tenemos que utilizar un alojamiento web y un dominio que pueda atraer a los posibles clientes o usuarios.
Por un lado puedes enfocar tu alojamiento web pensando en ahorrar el máximo posible y dejando a un lado la atención al cliente y los posibles fallos que puedas tener en el futuro, pero lo más recomendable es gastar un poquito más y tener una mejor atención personalizada en tu Hosting.
Cada minuto que pierdes dedicándote a habilitar tu Hosting, es tiempo y dinero perdido que no te van a pagar.
Características y consejos para elegir un buen Hosting
- Web estática o web dinámica: es lo primero que debes decidir ya que todo se va a basar en esta decisión. Asegúrate que tu Hosting para una web dinámica permita la ejecución de 15 procesos en paralelo, un mínimo de 256MB de memoria y una base de datos en MySQL o la que mejor conozcas.
- Herramientas de administración de Hosting: contrata siempre un servicio que utilice herramientas estándares de Hosting.
- Rendimiento del servidor Hosting: si es muy barato, tiene muchas opciones pero su rendimiento es pésimo, de poco van a servir las primeras características.
- Dominios para tu Hosting: la mayoría te ofrece un dominio de forma gratuita pero como es algo muy importante, si el que consideras que es el mejor Hosting no te ofrece un Dominio gratuito, no te preocupes y compra el dominio de forma externa que no es caro.
- Excelente servicio: cada uno de los departamentos de esta compañía, debe saber gestionar correctamente sus tareas y por lo tanto, si llamas para informarte o para avisar de un problema, tienes que sentirte ayudado y agradecido porque están haciendo un buen trabajo.
- Experiencia real del usuario: busca información antes de contratar cualquier Hosting. Si ves que las primeras webs hablan muy bien pero el resto habla muy mal, tal vez hayan contratado una agencia de publicidad para conquistar las primeras posiciones orgánicas del navegador. Infórmate primero antes de dar el paso, no pierdes algo por hacerlo.
- Personal capacitado capaz de maximizar los recursos de un servidor: de nada sirve tener contratados 100 operarios si luego a la hora de tener un problema, ninguno sabe resolverlo y ocurre lo mismo con las prestaciones del servicio. Si el servidor es enorme pero no consigue la mejor productividad, te están engañando hablando de altos números que rápidamente vas a poder comprobar, por eso la devolución del dinero es importante.
- Velocidad de carga: la rapidez con la que carga tu web puede suponer que los usuarios se marchen como a todos nos ha pasado en más de una ocasión por eso es importante que compruebes cuál es el Hosting más rápido. Recuerda que Google premia en SEO a las webs con una mayor velocidad de carga, así que imagínate lo importante que es. Puedes comprobar la velocidad de carga del servidor con Pingdom.
- Soporte técnico competente: los mejores van a ser los que te arreglen las cosas rápida y adecuadamente. Dará igual que sea gratis si luego no solucionan tus problemas, por lo tanto es importante encontrar un Hosting que tenga empleados con conocimientos que resuelvan los problemas adecuadamente.
- Espacio del alojamiento web: puedes encontrarte de muchos tamaños desde 1GB a 50GB o incluso tener espacio ilimitado pero todo esto es un sobrecoste inaceptable si estás comenzando y con 1GB vas a ir holgado durante unos meses.
- Huir de recursos ilimitados a precios ridículos: no puede ser que un paquete con mil opciones y datos sin limite te salga por menos de 1 martinelli al mes porque algo no cuadra. Puedes probar si te de devuelven el dinero o te lo ofrecen gratis el primer año pero vas a comprobar que al mínimo problema, las cosas no son lo que parecen.
- Devolución del dinero: parece una tontería pero es muy importante. Si no eres un experto del tema, una empresa que ofrezca la devolución del dinero puede permitirte probar el servicio y que si no te gusta, pidas el cambio sin problema. Normalmente es una característica muy positiva porque implica que tienen seguridad sobre su plataforma. Si esta opción no está disponible pero ofrecen periodo de prueba sirve de igual manera ya que la idea es probar el servicio para ver cómo funciona el Hosting.
- Transferencia de datos en Hosting: cada visita añade un pequeño poso de datos que se va acumulando constantemente. Si tienes 10 visitas al día no has de preocuparte pero en cuanto tengas cientos o miles, debes comprobar y analizar cuál es el mejor Hosting para ti e intentar encontrar uno con mucha memoria o que no tenga límite de datos.
- Discos duros para Hosting: vas a poder utilizar los discos duros de toda la vida ya sean externos o internos pero los mejores ahora mismo son los discos con tecnología SSD que aunque son más caros, van a permitirte cargar cualquier página mucho más rápido
Debes comprender que un servicio de Hosting no va a hacer todo por ti, simplemente es una herramienta para ayudarte en el proceso.
Posicionar tu web como una de las primeras requiere mucho: sacrificio, esfuerzo y conocimiento; por lo tanto, si realmente quieres conseguir lo que estás buscando, no te rindas a la primera y piensa que cuanto más cuides tu web y la adaptes a las necesidades del mercado y los usuarios, más posibilidades vas a tener de conseguir tus propósitos.