En muchas partes del mundo, WhatsApp es algo más que una simple aplicación de mensajería. En Sudáfrica se ha producido recientemente el estreno de la primera serie hecha para WhatsApp, con un total de siete capítulos que se "emiten" a diario única y exclusivamente a través de esta aplicación. La serie se emite a través de un grupo en el que cada integrante corresponde a un personaje diferente de la trama.
Cada capítulo de la serie, bautizada con el nombre de Uk'Shona Kwelanga, nos adentra en la historia de una familia sudafricana que se ve obligada a tener que organizar de forma repentina un funeral de uno de sus miembros. La historia narra las dificultades con las que se encuentran muchas personas sin recursos a la hora de preparar un funeral en Sudáfrica, y las conversaciones se suceden en tiempo real tal y como si el espectador estuviera asistiendo a una conversación de un grupo de WhatsApp.
¿Algo más que una simple campaña de marketing?
Antes de entrar de lleno a analizar lo que podría implicar de cara al futuro el estreno de esta serie por WhatsApp, primero es importante que conozcamos realmente quién está detrás de este lanzamiento. La serie ha sido creada por la agencia de publicidad King James bajo el encargo de Sanlam, una empresa local de seguros de Sudáfrica. El objetivo de esta producción, en pocas palabras, consiste en hacer llegar al máximo número posible de personas la importancia de tener un seguro contratado para cubrir los posibles gastos que supone un funeral.
Por lo tanto, partimos de la base de que no estamos hablando de nada remotamente parecido a una producción de Netflix, un estreno en HBO o una apuesta como la que quiere hacer Facebook con los vídeos. Es una campaña de marketing (una campaña que ha tenido mucha repercusión en todo el mundo, todo hay que decirlo), pero ello no quita que esta noticia saque a la luz la realidad de las aplicaciones de mensajería en los países emergentes.
El uso que se hace de apps como WhatsApp en lugares tan remotos como -por ejemplo- la India nada tiene que ver con lo que estamos acostumbrados a ver en el mundo occidental. Lo que para nosotros es una simple aplicación para enviar emojis, para muchas personas es la herramienta más eficiente para muchas otras tareas que ni nos imaginaríamos.
La India, el mejor ejemplo de los usos que se le pueden llegar a dar a una simple aplicación de mensajería
Desde hace algunos años, ya hemos visto cómo aplicaciones que nacieron en su día con la única finalidad de poner en contacto a las personas se han ido convirtiendo poco a poco en herramientas cada vez más útiles para la sociedad. Ahí tenemos a Facebook con su herramienta de Safety Check, que con un par de clics nos permite confirmar a todos nuestros amigos que nos encontramos a salvo después de haber estado en la zona de un desastre natural o un atentado.
Pero echemos un vistazo a los usos que le dan los usuarios a WhatsApp en el mercado más popular que tiene esta aplicación: la India. Cada mes, en la India hay 200 millones de usuarios que se conectan a WhatsApp para mantener conversaciones con sus contactos, una cifra que deja en pañales las poco más que varias decenas de millones de usuarios que esta aplicación consigue movilizar cada mes en España. Con esta cifra, no es de extrañar que se haya convertido en algo más que una simple aplicación para chatear.
Tal y como explicaban recientemente desde el World Economic Forum, en la India WhatsApp ahora mismo es algo más que una simple app gratuita para chatear. En Hyderabad, una ciudad india con más de 11 millones de habitantes, las autoridades decidieron lanzar un grupo de WhatsApp que permitía notificar a la policía de los delitos que se estuvieran cometiendo en su zona; en tan solamente 30 días, las autoridades ya tenían entre manos cerca de 350 denuncias de los ciudadanos.
Pero la seguridad no es la única finalidad de este tipo de iniciativas. Esta aplicación de mensajería también se utiliza en la India para reportar actividades corruptas de los políticos, así como también sirve de gran ayuda en los casos de desastres naturales para organizar soporte procedente de todo el país. Incluso, puede ayudar a que la gente encuentre trabajo.
¿Y por qué WhatsApp, y no cualquier otra aplicación de mensajería?
Por supuesto, es lógico preguntarte por el motivo por el que WhatsApp -y no las muchas otras alternativas que existen- tiene tanta popularidad en países como la India. La explicación es muy sencilla: está disponible para todos los sistemas operativos más populares del mundo, fue de las primeras en lanzarse en el mercado allá por el año 2009 (Telegram, aunque parezca mentira, no llegó hasta el año 2013) y funciona incluso con las conexiones más lentas. Con todo eso, WhatsApp está llamada a seguir siendo mucho más que una simple app para enviar mensajes a los amigos... y a las pruebas nos remitimos.