Un reciente estudio ha determinado que el café, el
té, los refrescos con cafeína y las bebidas energéticas que contienen
cafeína pueden mejorar los problemas de impotencia.
La impotencia, causada generalmente por obesidad, sobrepeso, diabetes, colesterol alto, presión arterial alta o problemas psicológicos, fue el punto de partida de este estudio.
Para ello, los científicos del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas en Houston (EE.UU.) revisaron una investigación anterior de análisis nutricional del programa National Health and Nutrition Examination Survey, que contó con la participación de 3724 hombres mayores de 20 años y con problemas de impotencia.
Tras recopilar los datos, los investigadores encontraron que el 40,9 % de los participantes tenía sobrepeso, el 30,7 % padecía obesidad, el 51 % tenía la presión arterial alta y el 12,4 % tenía diabetes.
Los resultados del análisis revelaron que aquellos hombres que consumían de 85 a 170 miligramos de cafeína (2 o 3 tazas de café) al día eran un 42 % menos propensos a presentar disfunción eréctil o impotencia (indistintamente de si eran obesos o tenían presión arterial alta), comparado con los que no tomaban nada de cafeína o menos de 7 miligramos al día.
No obstante, se supo que la cafeína no tuvo el mismo efecto en los diabéticos.
“La diabetes es uno de los mayores factores de riesgo para la disfunción eréctil, así que no sorprende obtener estos resultados”, explicó David López, líder del estudio.
Aunque se requiere una investigación profunda para explicar la asociación entre la cafeína y reducción del riesgo de impotencia, los investigadores creen que la cafeína induce efectos farmacológicos que causarían la potencia sexual en los hombres.